Venezuela sin agua y sin luz

AMBIENTE: María Eugenia Gil Beroes

N o tenemos agua porque no hay líquido... o ¿será que no hay energía eléctrica que permita que el agua llegue? Y si no tenemos energía eléctrica... ¿será que no hay agua que la produzca? Parece ser un círculo vicioso en el que los ciudadanos estamos atrapados sin vislumbrar otras opciones. Sin observar que estamos hablando de un bien público y de un patrimonio natural.

El agua que consumimos viene en un 80% de los Parques Nacionales que mantienen protegidas las cuencas y las cabeceras de los ríos. La energía eléctrica, limpia, que produce el Guri y su sistema interconectado, la tenemos gracias al río Caroní. Guri fue planificada durante la dictadura de Pérez Jiménez, y ejecutada durante la presidencia de Raúl Leoni. Hoy, de sus 10 turbinas sólo están funcionando 4.


LA FALTA DE AGUA : CAMBIO CLIMÁTICO Y EL NIÑO
Abraham Salcedo, Prof. de Recursos Hídricos de Universidad Central de Venezuela, afirma que según las estadísticas que se estudian en su laboratorio la disminución de la lluvia este año no es significativa para el racionamiento planteado, está entre 20 y 30%.

"La planificación de los sistemas no se puede hacer a intervalos anuales. La planificación además toma en cuenta todos los factores que intervienen y los sistemas deberían soportar pequeñas bajas como ésta, e incluso otras más prolongadas. El seguimiento de la data te permite ver ciclos y planificar en consecuencia".


DESPILFARRO Y DERROCHE
En Venezuela el consumo de agua por día por persona es uno de los más altos del mundo, 450 lts, cuando organismos internacionales afirman que debería situarse en 250 lts. ¿Qué hacemos con esos 200 lts extra? Seguramente se van mientras barremos con agua, lavamos el carro con la manguera abierta, goteras, grifos abiertos mientras nos cepillamos los dientes o nos enjabonamos en la ducha. Lo cierto es que, con o sin crisis, deberíamos ser más concientes de nuestra conducta. El hecho de que tengamos un recurso no nos permite su derroche.

Pero el derroche no se elimina con malos consejos. Es mejor enseñar a la población el valor del recurso.


LOS MALOS CONSEJOS
El racionamiento de agua y los cortes de energía eléctrica no los vamos a resolver con baños de tres minutos, tampoco regresando a tecnologías contaminantes de planticas cubanas. El consumo de las baterías para las linternas puede generar un costo grande en contaminación, pues esas baterías tienen metales pesados que no se degradan. Los bombillos ahorradores tienen mercurio, y no hay un lugar de disposición final ni para las baterias ni para los bombillos. El problema del agua no es cortar el suministro pues cuando el agua regresa la presión, por lo general, daña o rompe tuberías. Lo cierto es que todos tenemos que contribuir, en la medida que nos corresponda. No es lo mismo la responsabilidad de un ciudadano de a pie que la de un ciudadano cuya función publica es tomar decisiones que afectan al colectivo.


LAS EVIDENCIAS
La falta de agua y de energía eléctrica no se puede esconder, pasar por alto o disimular. Tampoco vale endosar a otros la responsabilidad por su ausencia. Los tubos rotos de la ciudad son evidencia de, por lo menos, la falta de mantenimiento en las tuberías.

El mismo Alejandro Hitcher declaró que la pérdida de los millones de litros, el mes pasado en el sector de Loira Arriba, El Paraíso y La Vega, fue un tubo que se reparó inadecuadamente en 2004. Durante la semana pasada se registraron otras rupturas con sus consecuentes pérdidas de agua, en menor cantidad, pero pérdidas al fin en medio de este plan de racionamiento. Los artefactos eléctricos dañados y la totuma son una evidencia diaria del deterioro de la calidad de vida de todos.


LA DESPROFESIONALIZACIÓN
DEL SECTOR ELÉCTRICO
"La desprofesionalización, la improvisación, la militarización y la falta de planificación son la causa de esta crisis". Así lo afirma Víctor Poleo, Prof.

de Economía petrolera también de la UCV. Para Poleo el desarrollo de Coplanar y Edelca permitió una infraestructura de primer mundo, que además generó una escuela de planificadores con visión de futuro que permitió el manejo de esa capacidad energética del Caroní, envidia de muchos países, que están pagando muy alto el precio de su desarrollo, pues sus industrias dependen de una energía contaminante. Según Poleo esta crisis llegó para instalarse por mucho tiempo en cada uno de los hogares venezolanos porque no hay una solución por los momentos, ni siquiera a mediano plazo.


EJERCICIO IMAGINARIO
La situación es muy compleja, justamente porque afecta a casi 30 millones de personas, incluyendo a los mismos responsables. Hagamos un ejercicio: imaginemos a un hospital sin luz, a un Metro sin energía, a una refinería sin energía, a una carnicería sin energía, a una ciudad sin semáforos. Es hora de sentarse con los profesionales, dejar la improvisación, la inmediatez y los intereses políticos. "Esta crisis no se resuelve a punta de cheques", afirma Víctor Poleo. "Sus consecuencias pueden ser muy serias para todo el país", concluye.


SÓLO TRES
Por el momento sabemos de tres asociaciones civiles agrupadas en principio por la pérdida o daño de sus artefactos eléctricos por los apagones, www.defiendete.org, www.anauco.org, y el Comité de Afectados por los Apagones. No conocemos a ninguna asociación que reúna a los ciudadanos por la falta de agua, pero no tardará en aparecer.

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