Michael Stuhlbarg protagoniza la historia dirigida por los Coen
A serious man (Un hombre serio) de los hermanos Ethan y Joel Coen, nominada a los Oscar como Mejor película, es el plato fuerte de la cuarta edición del Festival Internacional de Cine Judío, que se llevará a cabo del 4 al 13 de junio, en las salas Paseo del Trasnocho, Centro Cultural Humboldt, La Previsora y la sede natural, en Hebraica. Son 16 títulos los que conforman la muestra, tres de los cuales son documentales.
Solveig Hoogesteijn, directora de Trasnocho Cultural, englobó el espíritu de la programación: "Es la manera cómo el pueblo judío, esté donde esté, se ve a sí mismo, de manera crítica y con sentido del humor".
La opinión fue secundada por José Antonio Soto, director del evento: "Este no es un festival complaciente, la cinematografía israelí es muy crítica y presenta con honestidad lo que vivimos".
En efecto, Un hombre serio es una película inteligente, de mucho humor negro, sobre un hombre que enfrenta las peores desgracias de su vida, todas pequeñas ante los designios de la naturaleza.
¡Qué lío!, por su parte, es una comedia romántica cuyo principal obstáculo es la religión. El director, Dirk Regel, presenta a una chica judía y a un "goy" (no judío) que deben aprender, junto a sus familias, a tolerarse, si quieren ser felices.
Un interesante documental de Richard Berge y Bonni Cohen aborda el robo de obras de arte perpetrado por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Se llama El saqueo de Europa.
Otro documental, El asesinato de Kasztner (de Gaylen Ross), relata la vida de un judío de Hungría que negoció con oficiales nazis para salvar la vida de miles de judíos de las cámaras de gas durante la Segunda Guerra Mundial.
Otros títulos de la muestra son: Cuestión de tamaño de Erez Tadmor, sobre un hombre que cansado de las dietas decide practicar sumo; La canción de las novias, dirigida por Karin Albou, en torno a la invasión de los alemanes a Túnez y cómo afecta la relación de dos amigas; y Protectores de la noche, de Ludi Boeken, que revive la historia de unos granjeros alemanes que aceptan proteger a judíos.
Silvia Cohen, otra de las directoras del Festival, destacó que el evento ha venido creciendo de 1.300 espectadores en la primera edición, a unas 5 mil personas en la más reciente. "Saltamos de la alegría al ver que la gente aprecia lo que mostramos", exclamó, quien espera que este año los números sean más positivos aún.
La programación, información de las películas y de actividades paralelas al Festival (tertulias, cine foros, proyecciones al aire libre) están en la muy completa página web Festival de Cine Judío Caracas.
(Con datos de EL UNIVERSAL)
Solveig Hoogesteijn, directora de Trasnocho Cultural, englobó el espíritu de la programación: "Es la manera cómo el pueblo judío, esté donde esté, se ve a sí mismo, de manera crítica y con sentido del humor".
La opinión fue secundada por José Antonio Soto, director del evento: "Este no es un festival complaciente, la cinematografía israelí es muy crítica y presenta con honestidad lo que vivimos".
En efecto, Un hombre serio es una película inteligente, de mucho humor negro, sobre un hombre que enfrenta las peores desgracias de su vida, todas pequeñas ante los designios de la naturaleza.
¡Qué lío!, por su parte, es una comedia romántica cuyo principal obstáculo es la religión. El director, Dirk Regel, presenta a una chica judía y a un "goy" (no judío) que deben aprender, junto a sus familias, a tolerarse, si quieren ser felices.
Un interesante documental de Richard Berge y Bonni Cohen aborda el robo de obras de arte perpetrado por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Se llama El saqueo de Europa.
Otro documental, El asesinato de Kasztner (de Gaylen Ross), relata la vida de un judío de Hungría que negoció con oficiales nazis para salvar la vida de miles de judíos de las cámaras de gas durante la Segunda Guerra Mundial.
Otros títulos de la muestra son: Cuestión de tamaño de Erez Tadmor, sobre un hombre que cansado de las dietas decide practicar sumo; La canción de las novias, dirigida por Karin Albou, en torno a la invasión de los alemanes a Túnez y cómo afecta la relación de dos amigas; y Protectores de la noche, de Ludi Boeken, que revive la historia de unos granjeros alemanes que aceptan proteger a judíos.
Silvia Cohen, otra de las directoras del Festival, destacó que el evento ha venido creciendo de 1.300 espectadores en la primera edición, a unas 5 mil personas en la más reciente. "Saltamos de la alegría al ver que la gente aprecia lo que mostramos", exclamó, quien espera que este año los números sean más positivos aún.
La programación, información de las películas y de actividades paralelas al Festival (tertulias, cine foros, proyecciones al aire libre) están en la muy completa página web Festival de Cine Judío Caracas.
(Con datos de EL UNIVERSAL)
No hay comentarios:
Publicar un comentario